Dejadme que os cuente un cuento. Tiene protagonista, trama y moraleja.
En un mundo feliz vivía un hombre feliz. El mundo era feliz porque habían conseguido aislar las cosas malas que ocurren. No es que no ocurrieran, tan solo era que pasaban lejos y además, solo se hablaba de ellas en los medios de comunicación así que siempre podía pensarse que era como una película. En ese mundo feliz, no se hablaba de muerte, dolor, miseria ni de abandono. La gente era cortés y siempre sonreía.